Av Ferrocarril
EL barrio Fontibón, antiguo pueblo muisca, lugar de paso hacia los principales puertos en la época de la Colonia terminó siendo el lugar de residencia en el que más he estado no tan de paso y cuyas muchas estructuras también resisten por permanecer, una de esas es el ferrocarril que atravesando el barrio se empeña en funcionar aunque a su alrededor haya dejado la estación que irónicamente ahora es una tienda de materiales para construcción, y con ella todo un espacio alrededor que las planeaciones de turno han ido despejando y derrumbando con proyectos de avenidas que nunca inician; espacios sin dueño, en los que suelen aparecer tanto las más exóticos desechos, como los más hermosos cielos. Si recorres la carrilera hacia el oriente puedes ver los cerros y Monserrate muy pequeño, detrás de un amplio cielo aun sin edificios, pero recuerda que algunos temen pasar por ahí de noche, otros la usan para no ser vistos por un momento, y la mayoría pasean sus perros o la usan para deshacerse de lo que ya no quieren, sorprendiendo por la diversidad de cosas que puedes ver y perder de vista en minutos. Viendo estas casas antiguas algunas muy dignas con sus basuras pienso en ese refrán que dice que la basura de unos es el tesoro de otros.